La energía solar que recibimos no siempre coincide con los momentos en que más la necesitamos. Los interacumuladores sirven para echarnos una mano en esos momentos de mayor consumo y sacar así el máximo provecho a nuestra instalación de energía solar térmica.
Toda instalación solar debe disponer de un espacio donde acumular el agua calentada por los captadores solares para poder usarla posteriormente, cuando se necesite.
Esta acumulación se realiza en depósitos que pueden ser acumuladores o interacumuladores.
¿Cuál es la diferencia?
– Los acumuladores sólo sirven para acumular agua ya caliente, por lo que necesitan un sistema de intercambio externo.
– Los interacumuladores acumulan agua y también la calientan para su uso, ya que disponen de un intercambiador interno.
En ambos casos es muy importante determinar el material de fabricación: en acero inoxidable, vitrificados, de pintura sanitaria, de acero al carbono, etc., que dependerá en gran medida del propio diseño de la instalación y de la calidad de agua de la zona.
Para funcionar, los interacumuladores necesitan estar conectados a una fuente de calor externa, en este caso a un captador solar.
Los interacumuladores de uso doméstico normalmente se colocan en el interior de la vivienda, aunque también hay modelos preparados para uso exterior.
TIPOS DE INTERACUMULADORES
Hay dos clases fundamentales de interacumuladores:
– De doble envolvente: es como un depósito dentro de otro depósito. En el espacio que separa ambos depósitos circula el agua calentada en los captadores solares que se encarga de calentar el agua del depósito interior.
– De serpentín interior: disponen de una tubería enrollada con forma de espiral por la que circula el fluido caloportador. Esta tubería, llamada serpentín, se ubica en el interior del depósito –idealmente en la parte baja– en contacto directo con el agua de consumo para calentarla.
Los interacumuladores con un serpentín adecuado suelen ser más eficaces y proporcionar mayor confort al usuario, entre otras razones porque aprovechan al máximo el denominado efecto de estratificación, aumentando el número de litros disponible a temperatura de consumo y evitando las oscilaciones en la temperatura de salida del agua caliente (lo que se agradece especialmente en el momento de la ducha).
Cointra dispone de interacumuladores para instalación interior preparados para energía solar térmica y con serpentín de alto rendimiento que van desde los 100 hasta los 500 litros.
La gama de interacumuladores Cointra cubre, por tanto, las distintas necesidades de los usuarios y permite disfrutar al máximo del agua caliente en las mejores condiciones usando energía solar térmica.